La Calle de Córdoba XXI

martes, 4 de agosto de 2020

Juan Carlos I y la constitución amoral española

Juan Carlos, Rey de España, ha huido, o se ha ocultado y nadie sabe dónde está. Esa es una parte de la noticia. La otra es que  el denominado como «Consenso Constitucional» de la transición española de 1978 también se encuentra en paradero desconocido a causa de dos caricaturas de chiste; un «comisario» mortadelo, guarda y administrador de las cloacas del viejo régimen, junto a una princesa picarona de la alta burguesía alemana. Entre Corina y Villarejo el destino interpuso un Rey; El Rey de España restaurado por el dictador Franco.

Paradójicamente Sánchez proclama la adhesión del PSOE al viejo pacto constitucional. Frente al trono abandonado el presidente del gobierno de España Pedro Sánchez, manifiesta su respeto al «consenso constitucional» español. Consenso que se reduce en la práctica a la pura y simple aceptación –por claras razones de conveniencia–, de un modus vivendi heredado de la etapa de la dictadura sin consenso moral alguno.